Espacio Tejer Arema
Espacio Tejer Arema
LA GUAJIRA, COLOMBIA 12°02’51”N 71°09’39”W
Categoría: Pedagogía y Arquitectura Social y Territorio
Área: 895 m2
Año: 2021
Clientes: Comunidad wayuu de Arema
Colaboradores: Miguel Steiner, María Luisa Barliza, Reye Barliza, Elianta Romero Barliza, Nando Romero Barliza, Valentina Aguilar, Sofía Uribe.
Alianzas: IBU Foundation, EL DORADO EDIT
La Escuela de Tejido Arema es un proyecto ubicado en La Guajira, Colombia. Es un espacio de tejido construido para mujeres artesanas, donde pueden reunirse, compartir conocimientos y mejorar sus habilidades, al mismo tiempo que ofrece un programa educativo para los niños de la comunidad cercana. El proceso de diseño, adquisición de materiales y construcción se llevó a cabo de manera colaborativa con los lugareños, comprometidos en compartir sus técnicas y conocimientos locales para construir juntos espacios para la creatividad artesanal, el diálogo y la preservación cultural. Dado el contexto desértico, la disponibilidad de materiales es limitada y costosa. Para las comunidades indígenas y rurales, materiales industrializados como el cemento, el metal y el vidrio representan poder adquisitivo y colonización. Por lo tanto, al elegir soluciones naturales y locales y al construir espacios significativos a través de metodologías colectivas, es posible reevaluar la precaria percepción de los materiales y técnicas en peligro de desaparición, al mismo tiempo que se ofrecen medios para apoyar a los artesanos locales que dominan el uso de materiales como la madera de yotohoro y el trupillo.
The Arema Weaving School is a project located in La Guajira, Colombia. It serves as a weaving space designed for women artisans to come together, share knowledge, and enhance their skills, all while also providing an educational program for the children of the nearby community. The process of design, material procurement, and construction was carried out collaboratively with the local residents, who were dedicated to sharing their local techniques and knowledge to collectively create spaces for artisanal creativity, dialogue, and cultural preservation. Given the desert context, the availability of materials is limited and costly.
For indigenous and rural communities, industrialized materials like cement, metal, and glass often symbolize economic power and colonization. Therefore, by opting for natural and local solutions and constructing meaningful spaces through collective methodologies, the tenuous perception of materials and techniques at risk of disappearing can be reevaluated. This approach also provides a means of supporting local artisans who excel in using materials such as yotohoro and trupillo wood.